Amistad

En la amistad el amor se convierte en incondicional, cuando buscas el bien de tu amigo, cuando respetas sus ideas, cuando lo aceptas tal y como es, cuando lo ayudas a crecer y superarse; si quieres una verdadera amistad, sin prisas, busca el conocimiento de la otra persona, resalta sus virtudes, minimiza sus defectos, y con mucho amor hazle reconocer sus errores.

Si bien la amistad no tiene una fórmula perfecta que nos garantice su buen funcionamiento, tal vez una pequeña referencia como un Decálogo de la amistad nos ayude a considerar ciertos aspectos de la amistad.

• Es fácil querer tener un amigo, es más difícil serlo.
• No te preocupes tener un amigo, es más difícil serlo.
• No te preocupes de recibir sino de dar.
• No temas disgustar a tu amigo, enséñale que el migo verdadero es el que está dispuesto a disgustarnos cien veces con tal de sernos útil una sola vez.
• El primer debe de un amigo: motivarlo para que sepa que creemos en él.
• Ábrete sinceramente, tienes que ser como el río, que alimenta las tierras y nunca niega sus aguas.
• La confianza es el vestíbulo de la amistasd.
• No aceptes al amigo que no te contradice, pues lo hará pensando que sólo quiere tu bien, aunque en ocasiones piense difentte a ti.
• No te dejes llevar del corazón ni de la prisa al elegir a tus amigos.
• La humildad entre amigos gana el corazón de ambos.
• Aprende a amar con el corazón para así disculpa.

 Los elementos que forjan amistades para toda la vida.